¿Qué es envejecer? ¿Qué es más importante a la hora de envejecer: la herencia o el ambiente? ¿Podemos actuar sobre nuestro propio envejecimiento? ¿Qué tendríamos que hacer para envejecer bien? Estas y otras muchas preguntas serán respondidas al largo de este curso en línea, en el que se pretende transmitir conocimientos actualizados y científicos sobre cómo llegar a una longevidad positiva y saludable, a la vez que motivar a los participantes en la puesta en práctica de una serie de comportamientos y hábitos de vida saludables.
Los conocimientos adquiridos no serán suficientes para el cambio hacia un envejecimiento activo; ello dependerá de que cada uno de los participantes incorpore, como hábitos, esos comportamientos saludables y activos que sabemos influyen en un envejecimiento óptimo, lo cual requerirá de una actitud positiva y de la determinación, el querer realizar algunos cambios.
En este curso partimos de la consideración de que el envejecimiento no tiene un claro inicio, sino que “vivir es envejecer y envejecer es vivir” y consideramos que a todo lo largo de la vida hay crecimiento, estabilidad y declive. Desde luego, huimos de una visión simplista, exclusivamente positiva, del envejecimiento y dado que la edad está asociada a la enfermedad, la discapacidad y a otros problemas, tratamos de promover ciertas “soluciones” que llevan consigo lo siguiente: optimizar las capacidades físicas, mentales, afectivas y sociales; prevenir potenciales enfermedades y problemas y, en su caso, compensar o paliar existentes déficits.
Esas estrategias, soluciones comportamentales y estilos de vida protectores o combativos de factores de riesgo pertenecen a cuatro dominios esenciales:
- La mejora de la salud y la funcionalidad.
- Promover el ejercicio físico y cognitivo regular.
- El mantenimiento y la optimización del afecto positivo y el control.
- La implicación familiar y social.
El curso está dirigido a personas de cualquier edad que estén interesadas en conocer cómo llevar una vida saludable y en envejecer bien.
Su superación va a requerir no solo el aprendizaje de conocimientos científicos, sino una implicación personal de los participantes puesto que pretendemos, también, la introducción de cambios en la forma de percibir la vejez y en la incorporación de hábitos saludables que lleven consigo, a largo plazo, el desarrollo personal y la satisfacción con la vida.